El peso
muerto rumano es uno de los ejercicios de bisagra de cadera más conocidos y realizados en los gimnasios de todo el mundo. El problema es que mucha gente cree, y de hecho en redes sociales se ve y escucha mucho, que es, en mayor o menor medida, un ejercicio para glúteo aparte de para isquios.
En este artículo vamos a hablar de la biomecánica del peso
muerto rumano y de cómo el movimiento involucra más a los isquios y al aductor antes que al glúteo.
Sí, has leído bien y no es una insinuación: el peso
muerto rumano involucra más al aductor que al glúteo y es muy fácil de demostrar. Está bien establecido en la literatura científica que los brazos de momento internos tanto del aductor mayor como de los isquiosurales aumentan conforme la cadera se va flexionando, conforme bajamos la barra durante el peso
muerto rumano.
El brazo de momento interno de un músculo es la distancia que hay desde la articulación hasta la línea de fuerza que ejercen las fibras musculares de un músculo durante un movimiento ejercicio. Cuánto más largo es el brazo de momento interno, más fuerza es capaz de producir el músculo en cuestión.
El caso es que si atendemos al brazo de momento interno del glúteo mayor, este es mayor, y por lo tanto más fuerte, cerca de la extensión completa de la cadera, como sucede al final de un hip thrust.