Estoy convencido de que no fui el único que reaccionó con escepticismo ante la noticia de una nueva película de la saga de 'El
planeta de los simios' poco a continuación del estreno de la excelente 'La guerra del
planeta de los simios'. A fin de cuentas, Fox había obtenido la proeza de hacer una de las mejores trilogías de la historia del cine, algo por lo que nadie da un duro cuando 'El origen del
planeta de los simios' llegó a los cines en 2011.
El hecho de que 'El reino del
planeta de los simios' cayese finalmente en manos de Wes Ball tampoco me invitaba a ser muy optimista, ya que la franquicia de 'El corredor del laberinto' era digna en líneas generales, pero el listón estaba demasiado alto. Una vez vista puedo decir que es una
secuela espectacular en el apartado visual, pero que en líneas generales se queda lejos de sus predecesoras.
Situada casi 300 años después de lo visto en el previo entrega, 'La guerra del
planeta de los simios' presenta un mundo en el que los
simios han prosperado y la humanidad no ha dejado de ir a peor. Precisamente es la aparición de una joven humana la que sirve como punto de arranque para una aventura que arranca de forma estimulante pero que luego parece conformarse con ofrece un espectáculo de masas digno y que se complica lo justo.