Mantener
Windows actualizado es fundamental para garantizar la seguridad, el rendimiento y el acceso a nuevas funciones. Sin embargo, las actualizaciones tardan en llegar de forma automática o pueden presentar yerros que impiden su instalación. En estos casos, es útil conocer métodos para
forzar la renovación de
Windows y asegurarnos de que nuestro equipo esté permanentemente al día.
En este artículo detallaremos las distintas maneras de
forzar una renovación en
Windows 10 y
Windows 11, utilizando herramientas oficiales de Microsoft, comandos en CMD o PowerShell y otros métodos avanzados. Además, abordaremos la solución a posibles yerros tras la instalación y cómo recuperar datos en caso de pérdida.
La forma más simple de asegurarnos de que
Windows está actualizado es utilizando la herramienta de actualización integrada en el sistema. Para hacerlo, sigue estos pasos:
- Abre el menú de inicio y selecciona Configuración.
- Accede a Windows Update.
- Haz clic en Buscar actualizaciones.
- Si aparece una nueva actualización, selecciona Descargar e instalar.
En la mayoría de los casos, este método es suficiente para actualizar el sistema. Sin embargo, si
Windows no encuentra actualizaciones disponibles y sabemos que hay una versión más reciente, podemos recurrir a opciones más avanzadas.