La directora
Arkasha Stevenson ha lanzado una precuela de uno de los grandes clásicos del cine de terror, sin dejar de honrar lo que fue la original de 1976, pero además dejando muchas referencias y pequeños guiños a muchas otras filmes de género que no tienen ninguna relación con
Damien.
La historia de niño huérfano adoptado por una familia, esconde un origen satánico y está destinado a convertirse en el Anticristo, es el epílogo de esta precuela que no se corta en hacer todo tipo de referencias, desde algunas muertes, como la caída de un tubo sobre una cura o el suicidio colgándose de una devota de satán, y además a otros detalles de la mitología que explicaba. No se entienden la una sin la otra.
"La primera profecía" no tiene nada que ver con los fantasmas que invaden el mundo a través de Internet de este éxito del J-Horror, pero la desaturación de la imagen y el planteamiento de la oscuridad a nivel de puesta en escena se parecen, en especial en la aparición de la hermana Anjélica quemada en un rincón oscuro, que incluso se mueve lentamente, como los fantasmas flotantes de este clásico del terror oriental.
La historia de una mujer embarazada, que sospecha que una secta satánica quiere quedarse con su bebé, no solo es una influencia en "La primera profecía", sino además en el film de Richard Donner.