Pagar con el móvil se ha convertido en una de las formas más cómodas y rápidas de realizar compras en tiendas físicas. Gracias a la tecnología NFC (Comunicación de Campo Cercano, por sus siglas en inglés) y aplicaciones como Google Wallet o Samsung Pay, hoy en día es posible dejar la cartera en casa y pagar con tan solo acercar el teléfono al lector de tarjetas.