A diferencia de otras especies, el ser humano utiliza el lenguaje como medio de comunicación algo que hemos perfeccionando a medida que pasan los años y que tiene al menos unos 50,000 años entre nosotros. Sin embargo, esto está siendo afectado por la generación Z que está perdiendo una habilidad que tenemos desde hace 5500 años lo cual puede generar estrés, problemas de  comunicación y de memoria.