Samsung planea revolucionar su línea de smartphones de gama alta con el esperado
Galaxy S26. Según rumores y filtraciones recientes, el
Galaxy S26 podría apostar por un diseño más delgado y estilizado, sin comprometer su rendimiento ni autonomía. La integración de la tecnología de baterías de silicio-carbono parece ser el movimiento clave para lograr este avance.
En los últimos años, el gigante coreano ha priorizado el perfeccionamiento de sus terminales tanto en estética como en funcionalidad. Sin embargo, la batería ha sido uno de los puntos débiles en sus modelos previos. Con el
Galaxy S26,
Samsung buscaría superar las limitaciones actuales, ofreciendo un dispositivo más delgado pero con una capacidad energética optimizada.
Las baterías de silicio-carbono han comenzado a ganar protagonismo en el mercado. Estas ofrecen una densidad energética superior en comparación con las tradicionales de iones de litio. La adopción de esta tecnología permitiría que los dispositivos sean hasta un 15% más compactos sin perder capacidad.
Filtraciones atribuidas a Ice Universe y otros expertos del sector señalan que
Samsung podría incorporar esta innovación en su serie
Galaxy S26. Además, la compañía además está considerando el uso de electrodos apilados, una tecnología ya utilizada en baterías para vehículos eléctricos. Esta técnica podría ser clave para aumentar la capacidad energética sin incrementar el tamaño físico del dispositivo.