Los filmes personales suelen asociarse a dramas íntimos o cintas experimentales de festival, pero para
David Leitch, director de películas como 'John Wick' o 'Deadpool 2', 'Profesión peligro' ('The Fall Guy') es otro tipo de film personal. Una que se viste de acción tontorrona pero al mismo tiempo quiere reivindicar todo un lado de
Hollywood que se suele olvidar
Habiendo hecho él mismo de doble de acción para actores de la talla de Brad Pitt o George Clooney, Leitch se une a Ryan Gosling para darnos su versión de lo que es ser un especialista de cine en el siglo XXI, todo eso sin olvidarse de hacer una comedia de acción y romance disfrutona y con corazón, una que se siente más sensible y humana que otras cintas del director.
La tercera en esta ecuación es Emily Blunt, una directora de cine haciendo su gran proyecto que igual que Gosling (un especialista venido a menos que es reclutado para la producción) tiene mucho que demostrar. El problema es que los dos se odian, pero estos viejos amantes tendrán que dejar sus rencillas atrás y sacar adelante una producción tan complicada que incluso cabe alguna conspiración. El objetivo es claro: contar una historia sobre reivindicar los trabajos "menores" del cine y bajar del pedestal a las grandes estrellas.
El gran fuerte por supuesto son sus stunts.